La Habana. 1° de julio de 2015
Alexis Rodríguez García
Este martes 30 de junio, al celebrarse el aniversario 106 del natalicio de Juan Bosch, el gran político y una de las plumas más trascendentales de República Dominicana y de Latinoamérica, se presentó en la Casa Cultural del ALBA en la capital cubana, el libro “En nombre de Bosch” de Joaquín Gerónimo Berroa.
La obra, que estudia los diferentes escenarios políticos que le correspondió al profesor Juan Bosch, fue presentada por el filósofo, investigador y profesor titular cubano Sergio Guerra Vilaboy, miembro de la Cátedra Juan Boch de la Universidad de La Habana y por su autor el arquitecto Joaquín Gerónimo, hoy Excelentísimo Embajador de la República Dominicana en Cuba.
A la presentación asistieron Señores Embajadores y representantes del cuerpo diplomático de América y el Caribe acreditados en la Isla; Luis Céspedes, presidente de la Cátedra Juan Bosch de la Universidad de La Habana; el poeta Waldo Leyva, director de la Casa Cultural del ALBA; el poeta y ensayista Roberto Fernández Retamar, presidente de Casa de la Américas y Patricio Bosch, hijo de Juan Bosch, entre otras personalidades e invitados.
“En el nombre de Bosch” analiza los diferentes escenarios políticos en los que le correspondió al profesor Juan Bosch, fundador del gobernante Partido de la Liberación Dominicana, realizar su extraordinaria obra humanística, abordando la confrontación de ideas, hechos y caracteres de los principales actores del drama político dominicano.
“Tengo que confesar, que desde que comencé a leer el libro, quedé atrapado en sus páginas; no se trata de un cumplido de ocasión, se trata de un sentimiento que nos lleva de la mano de la historia reciente de Santo Domingo, de República Dominicana. Nos hace llamar nuestra atención, sobre los hechos que han determinado la historia de ese país y nos explica por qué el Partido de Liberación Dominicana sigue en el poder de la hermana nación caribeña”, apuntó Sergio Guerra.
Al hacer un recorrido por las páginas de esta obra imprescindible para la historia de nuestra América, Guerra Vilaboy recordó momentos del paso de Bosch por suelo cubano. Vivió una etapa de su juventud en Cuba, aquí trabajó y escribió, participó en concursos literarios, entre ellos el Premio Alfonso Hernández Catá, en el que se alzó con el máximo galardón con su cuento “Luis Pie”. Al triunfo de la Revolución cubana visita la Isla en varias ocasiones, en su condición de Presidente del PLD. Por su condición de revolucionario ejemplar recibe en La Habana la Orden Félix Varela, el más alto reconocimiento del gobierno cubano a personalidades vinculadas con la actividad cultural. También recibió de manos de Fidel Castro, la Orden José Martí, una de las más altas condecoraciones que se otorga a ciudadanos cubanos, extranjeros y a Jefes de Estado o Gobierno por grandes hazañas a favor de la paz y la humanidad.
Para finalizar la presentación de “En nombre de Bosch”, Vilaboy afirmó que su autor: “El arquitecto Joaquín Gerónimo, desde muy joven, fue atraído por las ideas de izquierda y militó, desde fechas muy tempranas, en el Partido de Liberación Dominicana (PLD), captado, como él mismo dice en la obra, por quien sería el heredero inmediato de Juan Bosch, me refiero a Leonel Fernández, presidente de la nación en tres ocasiones, primero de 1996 al 2000 y luego por dos períodos consecutivos, del 2004 al 2012, con quien compartió una militancia activa en el PLD desde la Universidad autónoma de Santo Domingo. Es por ello que el libro culmina con una carta fechada el 22 de noviembre de 2006, que el autor enviara al presidente Leonel Fernández y que dice en uno de sus párrafos: “tengo una profunda fe en el porvenir de la República, bajo su sabia dirección, en la medida que seamos capaces de hacer girar solo algunos grados a la izquierda el timón de la historia, que hoy te tiene a ti como capitán”.
Finalmente y como homenaje al líder dominicano, su autor Joaquín Gerónimo expresó: “Juan Bosch es un hombre universal del siglo XX, con una obra realizada en múltiples facetas y yo escogí la política, porque fue el portavoz de nuestra generación en los años 60 y 70, pero es, repito, una faceta del Bosch universal. Me he atrevido a decir en diversos escenarios que la actividad política le robó a América Latina un premio Nobel de Literatura. Bosch fue un escritor que a la edad en que comenzó su carrera política (1962-63) ya había completado toda su obra literaria, que fue grandiosa”.
Fuente: http://www.habanaradio.cu/culturales/en-nombre-de-bosch/